Por Maricarmen Tapia Gómez |
Directora Crítica Urbana |
CRÍTICA URBANA N. 34 |
Asistimos a un complejo momento de múltiples quiebres que traen incertezas y confusión, pero también que iluminan estructuras encubiertas que nos creíamos como única manera – hegemónica- de explicar la realidad. De la mano del feminismo, el decolonialismo, el ecologismo, han quedado desnudas estructuras de pensamiento que reproducían distintos modos de opresión, con impactos directos en nuestros espacios y formas de vida.
Reconocer estas estructuras nos da la oportunidad de liberarnos, aun en medio de la saturación de hiperinformación. Es fácil perderse frente a velocidad de una seudorrespuesta de la IA a nuestras preguntas, contestando de manera literal y sin la rigurosidad de transparentar las fuentes de esa respuesta. Puede ser cómodo aceptar la respuesta, puede ser incómodo dejarse arrastrar por la pregunta como una acción necesaria para el aprendizaje permanente. Contestar no sólo para obtener una respuesta sino como proceso de buscar nuevas respuestas, que nos permitan salir de la caja, de la hermosa, asfixiante y fascinante caja.
El pensamiento hegemónico como conjunto de ideas, valores, creencias y conceptos se impone a través de distintos dispositivos y “explicaciones” que vamos adoptando como la forma de explicar y entender el mundo: desde la educación más temprana a los medios de comunicación, se va modelando nuestro pensamiento y forma de acción. Aquí algunas herramientas para desactivarlas:
- La deconstrucción es una herramienta clave para desligar nuestra identidad del aprendizaje consciente e inconsciente del pensamiento hegemónico. Por ejemplo, la deconstrucción del género, en un contexto patriarcal nos quita una venda y nos obliga a repensar nuestras creencias, nuestras acciones para no reproducir el círculo vicioso de la discriminación.
- El pensamiento crítico es otra herramienta. Frente al negacionismo, al autoritarismo, tenemos la capacidad de sopesar, contrastar, evaluar, comparar lo que vemos, sin tomar ninguna observación como un valor absoluto e inamovible.
- Hay quien sólo necesita un lápiz para crear. Sin embargo, hay algo que todos necesitamos para sacudirnos de encima el pensamiento hegemónico, y eso es el querer hacerlo. El deseo y voluntad de liberarse debe ser activado continuamente.
- Finalmente, para encontrarse con otra realidad, no la que arrojan en segundos los algoritmos, sino con la otra parte que nos define humanos y seres pensadores (homo sapiens), tenemos la creatividad, la solidaridad y el amor. Son valores que nos traen de vuelta a lo esencial y a lo que nos puede realizar profundamente. Desde estos valores es difícil explicar y asumir como natural la segregación o la discriminación socioespacial.
En este número se recogen reflexiones y experiencias que actúan y miran desde fuera del pensamiento hegemónico. La invitación es a continuar, desde la voluntad personal y la acción colectiva, desde la alegría de encontrarnos en estos textos y de imaginar, juntos, esas otras ciudades y territorios por crear.
Nota sobre la autora
Maricarmen Tapia Gómez. Arquitecta, doctora en Urbanismo por la Universitat Politècnica de Catalunya. Ha desarrollado su trabajo en el análisis y diseño de políticas urbanas, tanto en el mundo académico como en instituciones públicas. Participa activamente en la defensa de los derechos de las personas en la ciudad y el territorio, a través de organizaciones, publicaciones e investigaciones. Directora de Critica Urbana. Más artículos de la autora en Crítica Urbana.
Para citar este artículo:
Maricarmen Tapia Gómez. Desactivar el pensamiento hegemónico. Crítica Urbana. Revista de Estudios Urbanos y Territoriales Vol. 7, núm. 34, Más allá del pensamiento hegemónico. A Coruña: Crítica Urbana, diciembre 2024.